domingo, 16 de febrero de 2014

ADN.

Ella era perfección absoluta en cada célula procariota de su anatomía. Sus labios la más desgarradora partitura, su pelo los más ondulantes renglones, y sus dedos la más melosa melodía. Su sonrisa eran treinta y dos razones para sonreír, y sus ojos el espejo más verdadero. Sus genes la historia más maravillosa jamás escrita con cuatro letras. Era perfecta, fenotipica y genotipicamente hablando. Era poesía; era poesía en cada base nitrogenada, en cada pentosa, en cada enlace fosfodiester. Era tan absoluta y luchadora cómo un gen dominante, pero delicada y paciente cómo uno recesivo.  En contraposición a su magnificencia, él no era más que una célula haploide buscando su doble para sentirse diploide por fin.

2 comentarios:

  1. Un relato genial y muy original. Me ha gustado mucho la forma de escribirlo y la idea de incorporar todos los terminos relacioanados con célucas y composición humana.
    Muy original, como he dicho. Genial. :)

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  2. ¡Gracias! Me alegro de que te guste ^^
    La verdad es que es un relato un poco raro xD
    ¡Nos vemos!

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